Esta antigua guitarra criolla, hecha en Argentina, por un luthier de folclore, estaba quebrada en la union del mastil con el cuerpo, no poseía clavijas ni puente y tampoco cejuela. La restauración tomo 2 días. No soy un guitarrista de folclore, pero pude concluir que el resultado del trabajo fue positivo. Buena altura de cuerdas, nada de trasteo, mantenimiento de la afinación, vibración armonica en toda la guitarra, producto de un buen encolado, y sonido dulce y vintage, debido a la añejada madera que posee esta bella guitarra criolla.